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Exitosa rehabilitación de un águila coronada


La Dirección de Recursos Naturales Renovables de la Secretaría de Ambiente envió un ejemplar adulto de águila coronada (Buteogallus coronatus) al Programa de Conservación y Rescate de Aves Rapaces del Ecoparque de la Ciudad de Buenos Aires, para su rehabilitación.

El ave fue recuperada junto con un aguilucho común y un águila mora cuando se cerró el zoológico de San Rafael, en los últimos meses del año pasado. El aguilucho y el águila mora fueron rehabilitadas con el apoyo de Fundación Cullunche y Cetreros de Mendoza y liberadas en la provincia. En tanto, en octubre de 2016 y después de analizar el estado del águila coronada, las autoridades decidieron trasladarla al programa que funciona en Buenos Aires.

En el lugar,  se le efectuaron los controles sanitarios para conocer el estado clínico y físico del animal y determinar su estado de salud y nutricional. Para su rehabilitación se la ubicó en un recinto junto a otro ejemplar de águila coronada, para que pudiera lograr las interacciones propias de su especie, entrenando conductas naturales que le permitirán una mejor reinserción. Asimismo, se le colocó un microchip subcutáneo de identificación que permitirá analizar su comportamiento y seguir sus movimientos.

Una vez realizadas esas tareas, se dio por cumplida la primera etapa de rehabilitación del ave y se determinó que está lista para ingresar a una segunda etapa que se realiza en la provincia de San Luis. Por estas horas, la Provincia efectúa los trámites legales y logísticos para el traslado al Centro de Rescate de Fauna de La Florida, en San Luis. El establecimiento posee las instalaciones adecuadas para realizar la etapa final de la rehabilitación, con entrenamiento muscular y de hábitos de cacería. Esta institución está incluida en el Plan de Acción para la Conservación del Águila Coronada en la Argentina y posee un convenio de colaboración mutua con la Fundación Caburé-í.

La duración de esta segunda etapa de rehabilitación dependerá de la respuesta del ejemplar, pero su destino definitivo es la reconstitución en la provincia de origen con lugar y fecha a acordar con las autoridades de Fauna de Mendoza. El momento de liberación será acorde a la temporada óptima de suelta, es decir, primavera temprana y/o verano debido a la mayor disponibilidad de presas -serpientes y otros reptiles- de los que se alimenta el águila mora.

Se ha previsto colocarle al ejemplar un emisor VHF, donado por la Fundación Caburé-í, para monitorear su readaptación a su ambiente natural y, para su identificación a distancia, se le colocarán anillos en el tarso.

Son alentadores los antecedentes de liberación de esta especie con ejemplares que estuvieron varios años en cautiverio y con resultados positivos de adaptación al medio.

En particular, en la Provincia ya se han realizado liberaciones exitosas de numerosas aves y una pareja de cóndores.