Las nuevas reinas tuvieron su Serenata
Las jóvenes recién electas salieron al balcón del edificio de Turismo a saludar a la gente que las esperaba en el kilómetro cero para verlas de cerca y transmitirles los mejores deseos para el año de reinado que estaba por venir. Se trata de la reina nacional de la Vendimia 2017, Victoria Colovatti, de Maipú, y de la virreina, Romina Méndez Pattaro, de San Carlos.
Entre las autoridades provinciales estuvieron la presidenta del Ente Mendoza Turismo (Emetur), Gabriela Testa; el director de Promoción Turística, Marcelo Montenegro; el secretario de Cultura, Diego Gareca, y el director de Actividades Artísticas, Héctor Rosas.
Además, llegaron al lugar los intendentes de Maipú, Alejandro Bermejo, y de San Carlos, Jorge Difonso, quienes se mostraron muy contentos de estar acompañando a sus candidatas.
“Ha sido una alegría inmensa para nosotros. Es una chica plena, joven, con una belleza natural que nos representó muy bien a los maipucinos. Seguramente también nos va a representar excelentemente como reina nacional de la Vendimia. Viene de una familia humilde, trabajadora, Victoria transmite mucha paz”, señaló Bermejo.
Por su parte, Difonso destacó: “Teníamos muchas expectativas. Una vez concretado este sueño, se transformó en una alegría para el pueblo de San Carlos. La vamos a recibir con los brazos abiertos al momento de su regreso”.
Ambas reinas agradecieron el cariño de los mendocinos, en especial a los ciudadanos de sus comunas, que las apoyaron y acompañaron desde el momento en que salieron electas en sus fiestas departamentales.
Hubo pétalos de rosas mientras la Banda de Música de la Policía interpretaba boleros para las jóvenes. Luego los intendentes les obsequiaron sendos ramos de flores. La presidenta del Emetur les acercó copas de vino para brindar por las nuevas embajadoras de Mendoza y por una feliz y próspera cosecha para todos los habitantes de nuestra tierra.
La Serenata
El edificio del Emetur, donde antiguamente funcionaba el Jockey Club de Mendoza, fue construido por el reconocido arquitecto Juan Molina Civit. Fue uno de los primeros edificios de altura y uno de los primeros antisísmicos del país, luego del terremoto de 1861.
Emblemático por su valor patrimonial y escenario de una importante parte de la historia de la vida social mendocina, fue adquirido por la Provincia en la década del 30. Funcionan allí desde entonces varias reparticiones estatales.
Este lugar, desde hace años, es el elegido para realizar la Serenata a las Reinas, la primera actividad de las soberanas electas luego de finalizada la Fiesta Nacional de la Vendimia.